Pages

martes, 8 de enero de 2013

Feliz Consumo.






“Es el mal de estos tiempos, los locos guían a los ciegos.”
(William Shakespeare. 1564-1616)

I
En la urbe moderna,
lo más parecido a la felicidad
es encontrar aparcamiento en ella.

II
El antiguo asalariado,
en la urbe moderna,
encuentra su felicidad
rebuscándola en un basurero.
 
III
El antiguo asalariado
de la urbe moderna, gritó;
-¡Bajo los adoquines está la playa!-
y perdió gratuitamente
su ojo derecho.

IV
No!
La urbe moderna ya no es lo que era.
Ahora tenemos “centroscomerciales”
donde se almacena
hasta el ocio
del indiferente,
del apático,
del aburrido;
productor de plusvalía.
 
V
El consumismo en la urbe moderna
es una “visaelectrón”,
el paliativo
a la infelicidad
pintada de rosa,
aliñada con colonia
y adulterada con publicidad engañosa.

VI
El esclavo moderno
pasea su filantrópica
estupidez,
en su urbe modernista,
tanto como le permiten
afectivos invisibles lazos que,
elásticamente,
lo convierten en mercancía.




1 comentario: