Pages

martes, 8 de septiembre de 2015

El robledal




  Para los humanos que se adentraban en el subsuelo desaparecían los sentimientos y las  emociones. No les quedaban ni tan sólo los recuerdos y es por eso que para la pequeña Amy los consejos de sus progenitores recordándole que no debía  adentrarse en el robledal se habían volatizado y ahora no sentía nada, no necesitaba pensar y nada la atemorizaba. Tan sola y atrapada en la nada del espacio-tiempo mientras dos dragones la observaban con el sigilo y la precaución de no espantar a su presa;

La descuartizas tú o lo hago yo— se preguntaban.


Mi aportación al RetoDragón de RelatosMagar. 
http://relatosmagar.com/2015/08/09/participa-en-el-retodragon/

No hay comentarios:

Publicar un comentario