Karel Teige. Erotismo surrealista |
En las tardes de primavera,
solíamos pasear.
Ella me explicó que,
desde su ventana,
me observaba cada mañana y que,
hasta que no topaba de narices con el frío cristal,
no quitaba
su mirada
de mi tristeza.
No quiero ni pensar cómo te mirará cuando sea otoño.
ResponderEliminarTodo se andará.
EliminarUn saludo!